Uno de los grandes enemigos del cultivador son las plagas en plantas. Si son tratadas a tiempo, no llegarán a suponer un gran problema. Pero es especialmente importante saber cómo actuar contra esa determinada plaga. Y teniendo esto en cuenta, convendrá usar un insecticida sistémico o uno de contacto.
Cualquier insecticida puede actuar sobre uno o varios de los estados de desarrollo del insecto. Es decir, que el producto que actúa, por ejemplo, sobre las larvas del insecto, puede o no ser efectivo para matar los huevos o los insectos en estado adulto.
¿Qué es un insecticida sistémico?
Por definición, un insecticida o acaricida sistémico es aquel que cuando se aplica a una planta, penetra hasta los tejidos conductores y se reparte por toda ella. Aunque el producto no cubra toda la planta o no entre en contacto directo con los insectos, esta contiene los compuestos tóxicos del insecticida y actuará sobre los insectos que intenten alimentarse de ella.
Un insecticida sistémico se aplica mediante pulverización, mojando sin excesos haz y envés de las hojas, y los tallos. Pero también tiene grandes propiedades cuando se mezcla con el agua de riego. La asimilación por parte de las raíces es más rápida que cuando se aplica de modo foliar.
¿Qué diferencia hay entre un insecticida de contacto y uno sistémico?
Los insecticidas de contacto, en cambio, actúan como su propio nombre indica cuando se aplican directamente sobre el cuerpo del insecto. Generalmente, matan al insecto por envenenamiento, por asfixia o por deshidratación.
Algunos de los insecticidas de contacto más famosos en el cultivo ecológico son el jabón de potasio, el aceite de neem y la tierra de diatomeas. Especialmente efectivo es la tierra de diatomeas, un producto en polvo a base de algas diatomeas fosilizadas. Básicamente, son cristales de sílice que perforan el exoesqueleto de los insectos cuando entra en contacto con ellos.
¿Qué es un insecticida polivalente?
También llamados insecticidas combinados o de amplio espectro, son los insecticidas que actúan tanto por contacto como por ingestión. Y también ejercen acción sobre diferentes insectos en sus diferentes fases de desarrollo.
Uno de los mejores insecticidas sistémicos es el Epik, usado para pulgones, trips, cochinilla algodonosa, orugas o gusano cogollero… Pero también lo es el Neem, que actúa desde dentro de la planta causando un mal sabor en la savia.
¿Cuándo usar un insecticida sistémico?
Un insecticida sistémico se puede utilizar para olivos, maíz, árboles frutales, verduras, legumbres, plantas de interior… En definitiva, en cualquier planta con una plaga instalada.
Lo primero que se debe hacer siempre, es identificar el tipo de plaga. Siempre será preferible tratarla con un insecticida específico para esa plaga en concreto. Por ejemplo, los acaricidas son realmente muy efectivos contra araña roja y ácaros. Pero no los son tanto contra mosca blanca o trips, y viceversa. Aunque muchos insecticidas son polivalentes, siempre son más efectivos los que combaten una determinada plaga.
También se debe respetar siempre el plazo de seguridad que indica el fabricante entre la última aplicación del insecticida y la cosecha en plantas o árboles cuyo fruto consumiremos. De lo contrario, estaremos introduciendo en nuestro organismo sustancias tóxicas y muy peligrosas en algunos casos.
Los insecticidas sistémicos se deben emplear exclusivamente cuando existe una plaga en el cultivo. Como método preventivo actúan mejor los insecticidas de contacto como el neem, el jabón potásico o la tierra de diatomeas.
Si se aplican regularmente, evitarán que eclosionen los huevos de alguna posible puesta o intenten asentarse en la planta los primeros insectos perjudiciales. Además, como en el caso del jabón de potasa o de las diatomeas, aportan nutrientes como potasio o sílice.
Los restos del Epik que caen al suelo son perjudiciales para las mascotas ( perros, gatos ) si lo llegan a oler o chupar
Hola, Pablo. Efectivamente, el Epik es un producto tóxico tanto por ingestión como por inhalación, y se recomienda como mínimo dejar un plazo de seguridad de al menos 21 días desde la última aplicación. Si necesitas más información, puedes contactar con la marca https://sipcamiberia.es/ . ¡Un saludo!
Para los millones mosquitos que tienen Mía tomateras que puedo usar? El potásico y el neem no me funcionan…
Buenos dias, estoy aplicando mithomyl 90 sp, es sistemico polivalente, estoy aplicando 1, 3 kilogramos por hectaera en pulverizacion…estoy aplicando lo correcto?
Estoy haciendo esa aplicacion de 1.3 de mithomyl 90 sp en cultivo de maiz blanco
Hola espero que me puedas ayudar, le puse insecticida sistémico a una albahaca porque tenía una fuerte plaga, mi pregunta es si se pueden consumir las hojas que ya tenía (porque la plaga a penas afectó a la mitad) o aunque pasen los 21 días recomendados es mejor que ya no se consuma ?
Es comprensible que estés preocupada por la seguridad de consumir tu albahaca después de usar un insecticida sistémico. Aquí te dejo algunos puntos importantes a considerar:
Esperar el periodo de seguridad: El periodo de seguridad de 21 días es el tiempo recomendado que debes esperar antes de consumir las hojas después de aplicar un insecticida sistémico. Esto se debe a que el insecticida necesita tiempo para degradarse a niveles que se consideran seguros para el consumo humano.
Posible acumulación en hojas existentes: Como mencionas, el insecticida sistémico se absorbe por toda la planta, lo que significa que también se distribuye a las hojas que ya existían antes de la aplicación. Aunque la plaga no haya afectado a esas hojas, es posible que contengan residuos del insecticida.
Consumo seguro: Si decides consumir las hojas después del periodo de 21 días, asegúrate de lavarlas muy bien antes de usarlas. Sin embargo, si tienes dudas sobre la seguridad, es mejor evitar consumir esas hojas y esperar a que la planta produzca nuevas hojas después de que haya pasado el periodo de seguridad.
Alternativa segura: Si quieres estar completamente seguro, lo mejor es desechar las hojas actuales y esperar a que crezcan nuevas hojas después del periodo de seguridad. Estas nuevas hojas deberían ser más seguras para el consumo.
En resumen, aunque técnicamente es posible consumir las hojas después de los 21 días, si prefieres estar completamente seguro, considera desechar las hojas actuales y esperar a que crezcan nuevas.